– Canito, ¿qué se siente al llegar a centenario?
– Si te digo la verdad, Caña, estoy igual que con 30 años, lo único que ya se me va alguna viva.
Así era Cano, leyenda de la fotografía taurina. Quien el destino -por una deuda de Dominguín- quiso que estuviera en Linares el día que mató un toro a Manolete y desde esa fecha nace su leyenda. El que lloraba desconsoladamente la tarde que un ‘atanasio’ acabó con Manolo Montoliu en La Maestranza. Uno de los tío más simpáticos del toreo y que era amigo de todo el mundo. Al que le brillaban sus ojos picarones cuando hablaba con alguna chavala de buen ver. Genio y figura.
DEP y que nos esperes muchos años, Canito.
Perfecto.Vds tiene sensibilidad como buen escritor.
Me ha gustado mucho su recuerdo hacia un Grande de la Historia Taurina, como lo fue es y será para siempre el Gran Canito. D.E.P.
Dominguin le traía loco al gran Canito,no abia manera de cobrarle los encargos de reportajes fotográficos que le hacía siguiéndole por toda la piel de toro.DEP
Paco .,una pena no clasificarse para semifinales …pero muy bien el 20 de 54.Por lo demás.Balta y cia…tienen 4 años para enterarse.