Se deshoja agosto y recordando al Dúo Dinámico con su final del verano, un nuevo otoño abre las puertas a la vida. La estación de la melancolía y los poetas. Tiempos de vendimia, cuando maduran los membrillos y de empezar a escribir un nuevo cuaderno en los avatares de la vida. Un nuevo cuaderno en blanco y con muchas página de la vida por rellenar el que desde hoy le espera a Ramón Sánchez Miguel, inspector jefe de Cuerpo Nacional de Policía y presidente de la plaza de toros de Salamanca que este viernes cuelga el uniforme.
Se jubila y detrás queda una brillantísima página profesional que ha perdurado a lo largo de cuatro décadas. Cuarenta años desde que aquel muchacho del pueblo de Sancti Spíritus, cerca de Ciudad Rodrigo, que siempre destacó en los estudios y era hijo del señor Prisci el pintor, aprobó para la secreta, como se conocían a los inspectores del Cuerpo Nacional de la Policía antes de la unificación policial de 1986.
Mucho tiempo y una larga vida en diferentes destinos, entre ellos Bilbao en los años de plomo, cuando vio caer por las balas asesinas de ETA a varios compañeros y cada amanecer estaba lleno de interrogantes ante las amenazas de los extorsionadores del tiro en la nueva y la Goma-2. Allí se curtió en un excelente policía y le tocó ser protagonista, incluso, de momentos muy difíciles, como la riada de 1983 cuando en la recuperación de cadáveres él debía fracturarle los engarrotados dedos de las víctimas para tomar la huella digital y proceder a la identificación.
Aquel Ramón que en su niñez creció embelesado por la belleza del toro bravo criado en las fincas cercanas a su pueblo, en las que presenció tantos tentaderos y cada mañana veía salir de su casa a la leyenda del histórico ganadero llamado José Matías Bernardo ‘El Raboso’ pronto se hizo un gran aficionado a los toros. Y fue vitista, llegando a disfrutar plenamente con los últimos años del maestro de Vitigudino; también apasionado roblista, el torero paisano a quien tantas veces saludó y aplaudió tras triunfar sobre las arenas negras de Vista Alegre o las plazas del norte en las que Robles fue torero de culto. Y también se hizo capeísta, un ídolo en Bilba, a quien tanto admiró.
Entonces, tiempos aún de mozo galán, aferrado a las costumbres de su tierra, a los amigos y fiestas de los pueblos, cuando acumulaba días libres cogía su Seat Ronda para venirse a disfrutar a su arraigado Santis –modo del que denominan las gentes de la comarca a Sancti Spíritus, su pueblo-. Y entre sus paisanos era uno más, siempre dando ejemplo con esa serenidad y saber estar del que hizo gala. Aunque para la chavalería no pasaba inadvertido y nada más verlo, se hablaba con misterio de “ese ‘secreta’ que detiene a los terroristas de ETA”.
Años de Bilbao donde esperaba la llegada de septiembre para estar presente en la feria de Salamanca, donde tanto disfrutó sin pensar en su imaginación que un día iba a ser presidente de esa plaza. Pasa el tiempo, ya padre de familia, con media vida laboral cumplida tiene la oportunidad de venir a su tierra y no pierde la ocasión, siendo destinado en la comisaría de la capital charra. En ella pronto deja impronta de su personalidad, de ser un magnífico policía y una gran persona, hasta que entra a formar parte del equipo policial de la plaza de toros. Y ahí, Ramón Sánchez Miguel, es amigo de todo el mundo, facilita cualquier información a quien le pregunta y ventila las ventanas, haciendo trasparente la labor de los equipos, antes herméticamente cerrada.
Transcurren varios años y en 2010 sube el palco tras la feliz decisión del Delegado Territorial de la Junta de que solamente haya un presidente tras las sombras provocadas en tiempos que en el palco se alternaban dos inquilinos, ambos con procederes tan distintos. Entonces, con Ramón llega la paz y se gana a todos por su talente y humanidad, sabiendo acatar con enorme decoro las criticas y buscando siempre la positividad y el bien de la afición. Y por tanto de la Tauromaquia.
Hoy, en este taurino día de San Agustín, ya cerca del melancólico otoño, cuando rememoramos al Dúo Dinámico con su final del verano, colgará definitivamente el uniforme y nacerá la leyenda de quien ha sido un magnífico policía. Porque don Ramón se va con el deber cumplido y la inmensa cosecha de un montón de amigos en este etapa donde abre de par en par el libro que le queda por escribir, aún con todas las páginas en blanco.
Larga vida y un placer habernos cruzado en los mismos caminos, donde siempre fue un SEÑOR.
La profesionalidad, la seriedad profesional, y el espíritu de sacrificio, son valores sustentan la institución policial del CNP. Si además profesas esa afición taurina, esa defensa de los valores tradicionales de nuestra Fiesta Brava, entonces, compañero, tienes mi total admiración.
Magnifica definición de Ramón, de quien me congratulo de gozar de su amistad. Ramón, magnífico profesional de la Policía, excelente Presidente de La Glorieta, pero, por encima de todo, gran persona.
A buen seguro que Salamanca recordará su buen hacer policial y La Glorieta echará de menos a este charro lígrimo en sus septembrinas ferias de la Virgen de la Vega
Muy bonito, Paco, lo que le escribes a Ramón. Gracias a ti conocemos detalles y bondades de personajes como él, tan necesarios en nuestra vida y para nuestra historia. Según lo cuentas tú, ya pueden presumir en Salamanca de Ramón, ya….
Un gran abrazo. Y si tienes oportunidad, dárselo también a Ramón. Enhorabuena a los dos.
Un abrazo Ramón. Con qué amabilidad me atendió siempre en la Glorieta.
Un magnífico presidente, gran aficionado y buenísima persona.
Gran persona si señor. Que disfrute todo lo que se merece.
Un gran amigo, toda mi admiración hacia el.
Enhorabuena Ramón, espero que todo te vaya bien en tu nueva situación. Un abrazo
Enhorabuena por la jubilación, don Ramón. Me llevo grandes recuerdos de usted.
Larga vida a Ramón.
Toda la razón en el artículo el trajo nornalidad al palco de La Glorieta.
Un orgullo haber sido compañero y como aficionado un estupendo presidente.
Muy grande ramon bien merecido tienes ese descanso que ahora te llega seguro que disfrutaras a tope de la familia un gran abrazo
Disfruta de tu gran merecido descanso
Enhorabuena Ramón. Que bien te describe Cañamero.
Ramón, no te vas a jubilar nunca. La plaza de Sanctis te estará esperando todos los años para que presidas sus corridas. Enhorabuena por tu jubilación y que la disfrutes muchísimos años. Un abrazo.
El palco de La Glorieta le echará de menos pero disfrutará de su afición en los tendidos y quién sabe… puede que le veamos protestando a presidencia! Deja el listón alto!
Yo le conoci personalmente ese día. Ya tendremos ocasión de vernos con frecuencia. Un abrazo. Angelillo de Candelario
Tuve la suerte de conocerle el otro día y espero coincidir con él más frecuentemente a partir de ahora.
Ha sido un placer.
Angelillo de Candelario
Enhorabuena Ramon , que disfrutes de tu jubilación, como te mereces. Un abrazo
Enhorabuena Ramon! Disfruta de tu merecida Jubilación!! Un abrazo
Gran persona. Que disfrute de la más que merecida jubilación
Buen Presidente y mejor PERSONA
Mi mas cordialidad enhorabuena, ya podrás por tu pase a la situación de jubilación, ya no tendra que aguantar nuestra petición de orejas, y vuelta al ruedo, etc…
Enhorabuena Ramón,un abrazo y que disfrutes como aficionado
Precioso artículo, Paco.
Bonito artículo PACO a RAMON gran profesional gran taurino y gran persona disfruta de tu jubilación un saludo SOFIA