Emilio Muñoz, desde su actual puesto de comentarista en el canal televisivo Toros, recuerda al entrenador portugués José Mourinho con su eterna cara de cabreo. Con buscar responsables, siempre lejos de la realidad y estar con la escopeta cargada para atacar a quienes no son de su cuerda. Sobre todo si se trata de la afición de Madrid y más concretamente del Tendido 7, al que detesta más que la monja Sor Lucía Caram a España. Porque, el de Triana, que tantas veces necesita un bozal que silencie sus bobadas, pregona por el torito anovillado, con los pitones mutilados o el triunfalismo por la proliferación de orejas a cualquier precio. Por eso, con su esa eterna cara de cabreo que tanto recuerda a Mourinho, enseguida salta contra los presidentes, aficionados… O a la escasa prensa decente que queda en estos tiempos donde el periodismo está al servicio del poder y a hacer el cado gordo a toreros y ‘sistema’, en vez de denunciar tantos males como existen en la Fiesta.
Y es que no se puede entender como un torero que jamás encajó en Las Ventas, donde su mayor premio fue una vuelta al ruedo en casi ¡40 tardes! ahora sea la estrella en las retransmisiones taurinas. Es tan inconcebible cómo si, imaginen, el nuevo gobierno le da a Puigdemont la cancillería de Asuntos Exteriores. O a Otegui la Dirección General de la Guardia Civil. Porque para ese puesto, el mismo que ahora degrada Emilio Muñoz, hay infinidad de profesionales que aman y respeta a la plaza de Las Ventas con su afición. Nunca a quien con su cara de cabreo solo sabe que insultar a esa sabia afición y a los presidentes, mientras busca esa Fiesta ligt del triunfalismo y el torito mocho.
Este señor era tan listo y lo veia tan fácil cuando toreaba?. A ver si es un poco más humilde: Menso hablar y mas escuchar.
Buenas tardes D. Emilio.
Con la responsabilidad que da y provoca un micrófono abierto en un canal de TV, retransmitiendo una corrida de toros, como hace Ud esos comentarios tan simples que hasta pueden llevar maldad ?.
De valor y enjuicie sin dañar a nadie,que los que se visten de luces luchan por lo que usted luchó.
No sea Usted tan desahogado y piense más y mejor antes de hablar.
Con mi respeto,
Un saludo