Los bailes del Recreo

Este día de Los Santos, con sus traiciones de siempre, su sabor a buñuelo y castañas asadas, ahora invadidas por Halloween, esa horrible moda/horterada llegada de América y que ha calado en este país que tanto le cuesta defender su rico legado, se fue Lucas Martín, un personaje en el Campo Charro. Lucas durante cerca de quince años movió más gente que nadie en su negocio hostelero y puso a La Fuente de San Esteban en los más alto en cuanto a lugar de ocio y lugar de encuentro al que, cada fin de semana llegaba una muchedumbre de todos lo puntos de la provincia, de La Ribera/Arribes, a la sierra, de la socampana mirobrigense a la propia capital. Ahora que  se nos ha ido Lucas, fundador de la cafetería El Recreo, donde al lado, poco después, levantó una discoteca que llevó el mismo nombre y fue todo un fenómeno social, ha vuelto a surgir el recuerdo teñido de añoranza de aquella época, sin duda alguna la mejor de nuestras vidas.

Cuando Lucas, que de recién casado había emigrado a París y allí nacieron sus hijos –Enrique e Inmaculada-, regresó a su pueblo de Boadilla y puso una marcha una explotación de vacas lecheras, alternando con extras en el restaurante Vegallana, que acababa de fundar su hermano Fernando, asociado al célebre Teyo, ya tenía madura la idea de montar un bar.  Entonces no tardó en abrir la cafetería El Recreo, espaciosa, moderna y muy luminosa, con una gran chimenea al final, e inauguró al lado una pista de baile al aire libre, jamás pudo imaginar que andando el tiempo, al techar y transformar la antigua pista en discoteca, acabaría siendo un lugar tan concurrido y emblemático que, con la llegada del fin de semana, recibía a una avalancha de jóvenes, ávidos de alegría y diversión.

El Recreo, durante la década de los 80 y hasta los primeros años 90 contribuyó a escribir muchas de las páginas sociales en la historia del Campo Charro y fue el rincón donde decenas de parejas –me atrevería a decir cientos- empezaron sus escarceos amorosos y a muchos de ellos le llevaron a caminar juntos por la vida. Fueron tantos los matrimonios surgidos del Recreo que si Lucas y Agustina, su esposa, hubieran apadrinado las bodas habrían necesitado una millonada.

El Recreo marcó toda una época y el personal que trabajó en ella gozó de merecida popularidad durante todo ese tiempo. Era el ejemplo del señor Ángel el portero, un hombre ya mayor que renqueaba de una pierna y nunca se casó con nadie: “caballero, caballero, su entrada” -decía- y allí no dejaba entrar ni a sus parientes si antes no se habían retratado en taquilla. La música corría a cargo de Benedicto Fernández, el popular Bene, que pronto se convirtió en un célebre pincha y después, al cerrar El Recreo abrió el bar Disparate, en La Fuente.

Entonces, gracias al Recreo, el pueblo de La Fuente vivió su época dorada y a su luz se alumbraron otro montón de establecimientos. Porque ese lugar de ocio cada noche, desde que abría sus puertas, era un acontecimiento, hasta altas horas de la madrugada, que coincidiendo con las primeras claras echaba el cierre. Entonces, se apagaban las luces y el eco de la música se perdía entre las encinas del Campo Charro. En esos instantes, por los alrededores siempre quedaba algún borracho lamentando a lágrima viva lo corta que fue su noche, otros imitando a los divos de la canción española mientras deambulaban por el exterior a la espera de que alguien lo llevase a su pueblo.

Después, ya a mediados de los 90, El Recreo comenzó a agonizar y un día cerró sus puertas para nacer la leyenda de un local que escribió, junto a la peñarandina discoteca Chacal, la página más destacada del ambiente provinciano en su época. A partir de entonces, sus ecos musicales se perdieron para siempre entre las cercanas encinas con la nostalgia de los mejores años. Los que tuvieron a Lucas Martín, todo un personaje que nos acaba de dejar, en un referente y protagonistas de una época.

Acerca de Paco Cañamero

En tres décadas juntando letras llevo recorrido mucho camino, pero barrunto que lo mejor está por venir. En El Adelanto me enseñaron el oficio; en Tribuna de Salamanca lo puse en práctica y me dejaron opinar y hasta mandar, pero esto último no me gustaba. En ese tiempo aprendí todo lo bueno que sé de esta profesión y todo lo malo. He entrevistado a cientos y cientos de personajes de la más variopinta condición. En ABC escribí obituarios y me asomé a la ventana de El País, además de escribir en otros medios -en Aplausos casi dos décadas- y disertar en conferencias por toda España y Francia. Pendiente siempre de la actualidad, me gustan los toros y el fútbol, enamorado del ferrocarril para un viaje sugerente y sugestivo, y una buena tertulia si puede ser regada con un tinto de Toro. Soy enemigo del ego y de los trepas. Llevo escrito veintisiete libros -dos aún sin publicar- y también he plantado árboles. De momento disfruto lo que puedo y me busco la vida en una profesión inmersa en época de cambios y azotada por los intereses y las nuevas tecnologías. Aunque esa es otra historia.

39 comentarios en “Los bailes del Recreo

  1. Muy buenos ratos pasamos allí. Tenemos buenos recuerdos. Ahora hacía falta un lugar como ese, pues reunía tres condiciones ideales: alejado del pueblo para no molestar con el ruido; escuchar buena música, cosa que ahora no se oye en ningún «local»; y campo o el silo para deshagorse con la que «saliera» con ganas de juerga. Mi pésame a la familia de Lucas.

  2. Te agradezco no sabes cuanto las palabras que le has dedicado a mi abuelo Paco, no te haces una idea de cuánto me hubiera gustado disfrutar de esa época, vuelvo a repetirte MUCHAS GRACIAS por recordarlo así. ❤️❤️

  3. No eres de Fuente si no:
    Te has bañado por la noche en las piscinas.
    Has bailado en El Recreo
    Echado un kiki en el silo.
    Corrido delante de Juanero.
    Pero lo más grande fue El Recreo y lo bien que nos los pasamos.
    Gracias Lucas por tanto y descansa en paz.

  4. Nunca olvidaré lo buena gente que eran Lucas y Agustina. La pista es un recuerdo imborrable en mi vida. El silo, los paseos por la carretera vieja de la estación, los coches en las cunetas que venían desde Salamanca y toda la comarca, los lentos, el reservado…..¡Que recuerdos!

  5. Lo mejor que pudimos tener en la fuente de san esteban para nuestra juventud. Nos ibamos todos en pandilla andando por la carretera de la estacion hasta llegar a la discoteca donde lo dábamos todo en la pista. Y luego si encontrabas algun rollito a los reservados a pasar un rato. No tenia nada que ver con las discotecas de ahora, esa discoteca le daba cien vueltas a cualquiera. Que buenos recuerdos. Todas las noches estaba a rebosar de gente de todas partes. Mi pesame a la familia.

  6. D.E.P que recuerdos que fines de semana pasábamos hay me encantaba ir al recreo y que baratos eran los cubatas,estaba petado de gente y esos lentos que ponía el Bene a partir de la una

  7. Que buenos recuerdos, que buenos años. Mi más sentido pésame para Agustina, Quique, Inmaculada. DEP Lucas y gracias por aquellos años y sobre todo por tu infinita paciencia

  8. Gracias Paco por recordarnos aquellos años, y garcías Lucas por haberlos hecho posibles. Seguro que los que aquí escribimos, daríamos casi cualquier cosa por volver a vivir una de aquellas noches. DEP Lucas

  9. Sin haber conocido nunca su sala, El Recreo, vaya desde aquí mi reconocimiento y respeto a él y a todos los que idearon negocios semejantes porque le debemos los mejores recuerdos de nuestra juventud. D.E.P.

  10. A parte de la mejor época de nuestra juventud, nunca olvidemos la mano de Agustina en la cocina esa carne al ajillo, ese gallo de corral y un sin fin de especialidades.y el agrado que nos tenían, ,LUCAS D,E,P,

  11. Fui a verte y no estabas Querido tío, hubiese sido mi última oportunidad, no lo sabia, hacia mucho que no nos veíamos y ya no nos veremos, un abrazo póstumo. D.E.P.

  12. Esta muy bien el recuerdo de El Recreo, Lucas, Angel, etc. Ángel era de El Cubo como lo eran ,también Víctor yTinin Moro componentes del grupo Huella ,nada tienen que ver con los de ahora. ¿Recuerdas Paco? Tu eres demasiado joven y a lo mejor no llegaste a ellos. Eran buenos músicos. Además de Victor y Tinin recuerdo al vocalista, Domingo, al batería Fabian… creo que entonces todavía era pista al aire libre. Buenas recuerdos.

  13. Ya te digo Paco, sobre todo en verano con todos los forasteros como yo los emigrantes de fuentes,boada, el cubo ,yeltes cabrillas, tamames, etc. etc…..siempre a rebosar, y con bene pinchando la mejor música del momento y como no la alluda que hacía Bernardo ha lucas recogiendo vaso ,entre bailé y bailé bonitos recuerdos,si,si,

  14. Ya te digo Paco, sobre todo en verano con todos los forasteros como yo los emigrantes de fuentes,boada, el cubo ,yeltes cabrillas, tamames, etc. etc…..siempre a rebosar, y con bene pinchando la mejor música del momento y como no la alluda que hacía Bernardo ha lucas recogiendo vaso ,entre bailé y bailé bonitos recuerdos,si,si, cuantas veces nos íbamos ala estación alas 2.30 que llegaba el tren portugués haber quien se bajaba ,y allí estaba como siempre longanizo con su taxi para cubrir algún servicio,,

  15. Yo también conocí allí a mi mujer, nada extraordinario, fuimos tantos….allí hice amistad con tropecientos del contorno a quienes no conocía de nada y que aun hoy nos saludamos cuando nos vemos. Años mas tarde han sido nuestros hijos quienes han hecho cuadrilla….y parece que fue ayer.
    Anécdotas por miles, como aquellos que le amenazaban con ir a por el tractor y echar abajo el local, o los guardias que andaban muy vivos para sacudir multas si el coche quedaba aparcado en el arcén, que por cierto se hincharon a llenar talonarios….
    Nuestros años de juventud, nuestros mejores años….

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