Antonio Lorca, maestro de la crítica

Antonio Lorca es un grande de la crítica taurina y, sobre todo, un hombre independiente que escribe sin mirar a los lados. Un espejo en el que se deberían mirarse quienes pretenden ejercer la profesión con rigor y libertad. Siempre al servicio del aficionado para plasmarle de manera limpia –y sin intereses- lo que ha ocurrido sobre el ruedo, algo que él borda estos días de feria de Sevilla en las páginas de El País. Y en breve en San Isidro.

Dueño de un brillante estilo literario, Lorca lo hace todo con verdad, sin tapujos, ni edulcorantes. Su madera humana y profesional es sincera, sin aglomerado alguno, razón por la que sus crónicas son modelos literarios cargados de honestidad para los aficionados, al reflejar lo que se ha visto en las plazas, lejos de tantas que, cada vez en mayor medida, están escritas al servicio de las figuras. Y del ‘sistema’. Porque hoy abundan los amanuenses convertidos en alguaciles de los taurinos para pregonar mentiras, que lejos de atajar el mal lo único que logran es aumentar la gravedad y seguir con la sangría de espantar al aficionado de las plazas.

La Fiesta necesita que se diga la verdad y gente con valor , sin que le tiemble el pulso, que se abran las ventanas para que el aficionado de a pie esté al corriente de los muchos taurinos de manos sucias que están al frente del negocio. Y tanto olor a podredumbre que hay en las cañerías de su organización. Lo deben saber porque este es el camino para que se haga una corriente que llegue con sabia nueva y traiga esa revolución que necesita la Tauromaquia para que la lave de arriba a abajo.

Antonio Lorca es el más claro ejemplo de quien canta las verdades del barquero, duela o no y siempre pone el dardo en la palabra. Por esa razón los taurinos, al más puro estilo mafioso, quieren acabar con su libertad, al igual que antes trataron de hacerlo con su maestro, el genial Joaquín Vidal. Porque ahora Antonio les molesta al escribir la verdad y denunciar los chanchullos. También el toro descastado de las figuras, la manipulación de astas, repetición de los carteles, el elevadísimo precio de las entradas, la falta de novilladas y, sobre todo, el lamentable estado de esta Fiesta que ahora es de cartón piedra, que es la impuesta por quienes se hacen ricos con ella y les da igual lo que piense el aficionado –especie en vías de extinción-.

Antonio Lorca es sobre todo un periodista íntegro que, bien sea política, actualidad, reportajes… ha brillado como una estrella en los medios de Sevilla. Al igual que lo hace en la sección taurina de El País, en el que siempre sabe poner el punto sobre la í en su justo sitio. Y sobre todo decir la verdad, porque el verdadero camino para arreglar la Fiesta es denunciando a quien tanto daño le hace, no enloqueciéndose con esa solemne tontería de que hoy se torea mejor que nunca y volverse loco con un lance. O que la Fiesta vive un momento superior, algo que escriben algunos pobres hombres que le dejan firmar en portales y, muchas más grave, en el canal Toros.

Vaya mi admiración a la figura de Antonio Lorca, un periodista de raza, íntegro y que siempre escribe sin mirar a los lados.

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Acerca de Paco Cañamero

En tres décadas juntando letras llevo recorrido mucho camino, pero barrunto que lo mejor está por venir. En El Adelanto me enseñaron el oficio; en Tribuna de Salamanca lo puse en práctica y me dejaron opinar y hasta mandar, pero esto último no me gustaba. En ese tiempo aprendí todo lo bueno que sé de esta profesión y todo lo malo. He entrevistado a cientos y cientos de personajes de la más variopinta condición. En ABC escribí obituarios y me asomé a la ventana de El País, además de escribir en otros medios -en Aplausos casi dos décadas- y disertar en conferencias por toda España y Francia. Pendiente siempre de la actualidad, me gustan los toros y el fútbol, enamorado del ferrocarril para un viaje sugerente y sugestivo, y una buena tertulia si puede ser regada con un tinto de Toro. Soy enemigo del ego y de los trepas. Llevo escrito veintisiete libros -dos aún sin publicar- y también he plantado árboles. De momento disfruto lo que puedo y me busco la vida en una profesión inmersa en época de cambios y azotada por los intereses y las nuevas tecnologías. Aunque esa es otra historia.

4 comentarios en “Antonio Lorca, maestro de la crítica

  1. Sr Lorca he leído atentamente su pluma y coincido con usted en un 95 %, pero me han enseñado que un General solo- no gana la guerra, necesita tener un ejército, en el mundo taurino los que pueden cambiar el sistema no quieren y pocos se atreven a levantar la voz, dónde están las asociaciones que dicen defender a los aficionados, porque tienen que elegir los carteles y ganaderías los matadores «llamados toreros» porque, los ganaderos permiten que se manipulen son toros etc etc.
    Pero yo quiero darle las gracias por haberme parado un momento en leer sus artículos
    y comprobar que hay periodistas honrados. Con todo mi respeto para ANTONIO LORCA.

  2. Mi más sincero apoyo a los comentarios taurinos de Antonio Lorca. Siempre con la verdad por delante. Ojalá hubiera muchos como él.

  3. Por fin, un autentico revistero . Un place leer sus reseñas que nos indican la verdad de lo que pasa en el ruedo. Gracias señor Lorca

  4. Señor Lorca, he tenido el placer de hablar con usted en alguna ocasión sintiéndome un gran admirador suyo, subrayó al 100 por 100 lo que usted manifiesta en sus artículos y como aficionado me siento tan engañado por los que se hacen llamar taurinos, que los anti taurinos sobran, cada dia esto se parece mas a un tablero de ajedrez, ellos mueven a los peones, pero nunca se comen entre ellos, solo intentan darse jaque mate
    Yo creo que el mundo taurino está tan corrompido, que todavía no han descubierto ningún fitosanitario que cure el mal.
    Siempre me dicho que las comparaciones son odiosas, pero entre talavante y morante creo que deberia de poner una tabacalera y jubilarse.

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